Jeonju es el alma tradicional de Corea, con su famoso Hanok Village, casas de té, callejones con encanto y el bibimbap más auténtico del país. Aquí la historia no se observa: se vive entre tejados curvos, paredes de papel hanji y calles empedradas.
Caminar por Jeonju es probar dulces callejeros con forma de flor, vestirse con hanbok para recorrer templos centenarios y sentarte a escribir en caligrafía coreana en talleres de artesanía local. Es el lugar ideal para conectar con la Corea más estética y sensorial.